sábado, 18 de agosto de 2012

Inocencia perdida


Soñar, soñar...
Siempre lo necesitamos.
El ser humano viene con el verbo soñar.

Ahora que todo pasa tan rápido,
Ahora que todo es tan frío
Ahora que casi no nos conocemos...
Más que nunca,
Necesitamos mantener nuestra inocencia y soñar.
Agarrarnos a algo aunque sepamos que quizá es una mentira.

Aunque nos equivoquemos y nos duela,
Pero siempre volveremos a soñar,
Volveremos a ser niños,
Y volveremos a equivocarnos y nos volverá a doler.

Y cuando haya cerdos, veremos claveles,
Pensaremos en rayos de sol cuando la lluvia caiga por nuestra piel...
Y las moscas serán mariposas,
Y nuestros ojos, estrellas...

¿No está cerca de la felicidad?
¿Para qué ser humanos si no?
¿No es la vida un gran sueño?

Soñemos, soñemos siempre...
Vivamos con las hadas y los dioses en una tierra sin límites
 Donde todos seamos iguales.
Sin prejuicios,
Sin miedo,
Sin gusanos ni culebras...

Soñemos, aspiremos siempre a algo mejor
Porque va en nuestra naturaleza.
Aunque puede que nunca lleguemos al Edén.
Pero no dejemos que nos castren.
Ahora que todo es así,
Mantengamos nuestra identidad y luchemos.

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